Azulejos de Toronto. (Imagen: La Jornada AP-VBM).
Los Azulejos de Toronto, van en busca de su tercera corona; los Dodgers de Los Ángeles, por su novena.
Azulejos de Toronto, por la Liga Americana, y Los Dodgers de Los Ángeles, por la Liga Nacional, disputarán la Serie Mundial 2025, con tendencias diferentes en cuanto a las posibilidades de uno y otro equipo, y con interesantes contrastes deportivos, que están pasando de agache, a pocas horas de que empiece la confrontación del máximo galardón del mejor béisbol del mundo.
Los Dodgers van en busca de capturar su novena corona, mientras que los Azulejos buscarán la tercera. Los ‘Esquivadores’ son los actuales campeones, derrotando a los Yanquis de Nueva York hace un año. Los ‘pajarracos’ canadienses ocuparon la última casilla de la división Este de la liga en la temporada 2024, pero este año se las ingeniaron para ganarla y estar en donde están en los actuales momentos.
Los ‘angelinos’ acumularon un buen margen de favoritismo para estar en esta cita desde el comienzo de esta campaña, mientras que los canadienses no se asomaban siquiera a estar dentro de posibles ganadores de su división.
Triunfaron en su división Oeste de la Nacional, pero los Dodgers tuvieron que llegar al Clásico de Octubre vía disputa de uno de los dos comodines, y para el caso, venciendo en dos juegos a los Rojos de Cincinnati. Y luego, derrotaron a los Filis de Filadelfia, 3 triunfos contra 1 derrota, en la vuelta divisional de la liga; y finalmente, ‘barrieron’ a los Cerveceros de Milwaukee, el mejor equipo de la temporada regular, con 97 victorias contra 61 derrotas, con 4 victorias sin reveses.
Los Azulejos, en cambio, ganaron el Este de la Liga Americana, empatados con los Yanquis, pero se quedaron con la corona por el triunfo que lograron en sus confrontaciones dentro del calendario regular, y volvieron a superar a los ‘Bombarderos’ en la vuelta divisional, con 3 victorias ante 1 derrota; y luego, vencen a los Marineros de Seattle, en la serie de campeonato por la liga, en un dramático 7o. juego, con pizarra de 4 carreras a 3, con tablazo de George Springer, con 2 corredores en la ruta en la séptima entrada, para llevarse el título de la Americana.
En los numeritos
Si los numeritos dijeran toda la verdad, los Azulejos estarían en la posición de adjudicarse la Serie Mundial. Pero sobre el terreno de juego, las cosas son diferentes.
Veamos apenas el registro de ambas novenas en la ronda por sus respectivos títulos de liga.
Los Azulejos batearon para 271, en 7 partidos, contra 250 de los Dodgers, en 4 juegos; conectaron 11 jonrones contra 6 de los ‘Esquivadores’; produjeron 37 carreras en los 7 juegos frente a los Marineros, y los Dodgers fabricaron 15 en los 4 partidos ante los Cerveceros; y compilaron una OPS de 820 ante 808 de sus rivales de turno.
Pero los Azulejos vencieron a los Marineros a pesar de que la divisa de Seattle disparó 14 cuadrangulares frente a 11 que ellos lograron en toda la serie.
La diferencia
La gran diferencia, en cambio, está en el cuerpo de lanzadores de ambas novenas. Es allí en donde puede radicar la ventaja que, sobre el escritorio, tienen los Dodgers frente a los Azulejos.
Los pupilos de Dave Roberts tienen una rotación de élite con Blake Snell, el japonés Yoshinobu Yamamoto, Tyler Glasnow y el astro japonés, Shohie Ohtani, que es lo más seguro, abrirá el cuarto juego de la Serie Mundial, con el cierre del juvenil pero sensacional, el veloz japonés, Roki Sasaki, para cerrar los partidos; pero es confirmado que Clayton Kershaw, el inmenso zurdo del equipo, estará disponible ‘para lo que sea necesario’.
El grupo de John Schneider, por el contrario, cuenta con una rotación exigida y ‘maltratada’, si el término se nos permite, integrada por Kevin Gausman, Shane Bieber, el experimentado, Max Scherzer, Chris Bassitt, y el novato, Trey Yesavage, contando con el fuerte taponero, Jeff Hoffman.
Al grupo de los Dodgers apenas le fabricaron 4 carreras en los 4 partidos ante los Cerveceros, para un raquítico 1.00 de efectividad, mientras que los Azulejos aceptaron 30 carreras, todas limpias, en los 7 juegos ante los Marineros, para un 4.35 carreras limpias, diferencia que pesa mucho en una serie de apenas 7 desafíos, como están señalado para disputarse en la Serie Mundial.
Sobre el terreno
Si no batea el japonés, Shohei Ohtani, lo hace Mookie Betts; o si no, Freddie Freeman; o Max Muncy saca a relucir su bate; y por qué no, Will Smith; o el boricua, Kike Hernández, o el dominicano, Teoscar Hernández; o Tommy Edman, en fin. Cualquiera de ellos, pueden dar frutos más que suficientes a los Dodgers a la hora de estar en el campo de juego.
Los Azulejos tienen en George Springer, hijo de una dama boricua y con abuelo panameño, el que hace sonar el bate cuando menos se espera; Nathan Lukes, da resultados en cualquier momento; el dominicano, Vladimir Guerrero Jr., difícil para cualquier lanzador; el mexicano, Alejandro Kirk, que no parece pero que es bien complicado cada vez que consume un turno al bate; Daulton Varsho, Ernie Clement y Addison Barger, que se combinan oportunamente con cualquier ‘parpadeo’ de los lanzadores; Isiah Kiner-Falefa, el venezolano, Andrés Giménez, Myles Straw y el posible retorno al diamante de Bo Bichette, le ofrece solidez a la novena, cuando ofensivamente lo necesitan.
Dodgers de los Ángles. (Imagen: CNN-VBM).
Los relevistas de ambas novenas, no han ofrecido la calidad que muchos esperaban, especialmente, porque sumar 5.52 carreras limpias por juego para los cerradores en los 7 partidos de esta postemporada, por parte del grupo de los Azulejos, es para preocupar a cualquier estratega, pese a que el taponero, Jeff Hoffman y el preparador, Louis Varland, han rendido lo esperado.
Otro tanto tienen los Dodgers, pues Blake Treinen, el llamado ‘apagafuegos’, tiene marca de 7.36 carreras limpias en esta postemporada, y Dave Roberts ha tenido que recurrir a los servicios del veloz derecho pero juvenil y sin experiencia, el japonés Roki Sasaki, para dar por terminado los juegos.
En la historia
Hay cosas que muchos valoran pero que por el paso del tiempo, muchos se olvidan.
Los Azulejos apenas han ganado 2 Series Mundiales —1992 y 1993—, y en esta última, hace 33 años, ni más ni menos, con un tablazo con 2 compañeros en la ruta de Joe Carter, el cuarto bate, con el conteo de 2 y 2, en el noveno episodio, frente a una oferta del zurdo, Mitch Williams, fue para darle la victoria frente a los Filis de Filadelfia, 8 carreras a 6, para liquidar el clásico en el sexto partido, ante 52.195 aficionados que estaban congregados en el estadio.
Cito Gastón, el estratega de los Azulejos, era el primer capataz afroamericano en la historia de las Grandes Ligas, en ganar 2 Series Mundiales de manera consecutiva.
Como tampoco pueden olvidar el cuadrangular de George Springer en la 7a. entrada frente al venezolano, Eduard Bazardo, para que los Azulejos vencieran a los Marineros este año, en el 7o. juego de la serie por el título de la Liga Americana.
Y desde luego, nadie puede olvidar el tablazo de Freddie Freeman, primera base de los Dodgers, frente al zurdo cubano, Néstor Cortés Jr., en el cierre de la décima entrada, con las bases llenas y 2 outs colgados en la pizarra, jugando en Los Ángeles, para derrotar a los Yanquis de Nueva York en el primer juego de la Serie Mundial 2024, que le abrió las puertas para conquistar el cetro del Clásico de Otoño, precisamente, el trono que empieza a defender desde este viernes, en Toronto.
Bueno o malo
Pero antes de que se haga el primer lanzamiento de esta Serie Mundial, los expertos han estado analizando, de manera prudente pero deportiva, si para los Dodgers el descanso de una semana les es beneficioso, o si, antes por el contrario, pueden perjudicarlos.
Las opiniones están divididas. Muchos sostienen que puede ser ‘malo’ porque el equipo pierde la continuidad del juego; otros consideran, por el contrario, que el descanso para el equipo es muy bueno, dadas las condiciones en que la nómina ha estado enfrentando lesiones por todos lados.
Y los expertos creen, sin objeción alguna, que hay tanto de ancho como de largo. Los Dodgers tienen con qué responder a las exigencias del clásico, y que los Azulejos traen una espectacular carrera de cierre de temporada, con esos 7 encuentros que disputaron con los Marineros.
Lo cierto de todo, es que los Dodgers van en busca de capturar su noveno título de Serie Mundial y el segundo consecutivo, para erigirse en el primer equipo en conseguir esa marca en este siglo, si es que lo alcanza; mientras que los Azulejos esperan cargar con el trofeo, para conseguir su tercer galardón en los Clásicos de Otoño desde cuando están jugando en las Grandes Ligas.
La ofensiva de los ‘Esquivadores’ es respetable y se hace respetar, por lo que cualquier inestabilidad del serpentinero rival, le saldrá costando caro, muy caro.
Los ‘pajarracos’ canadienses vienen con ímpetu ganador, después de la formidable serie final por el campeonato de la liga, de modo que, si las cosas resultan como se presume, tendremos el placer de presenciar una formidable Serie Mundial de béisbol.
Y si nos preguntan, hacia a qué lado está inclinado el fiel de la balanza, tendríamos que decir que para el costado de los Dodgers, por la forma en que juega, por su artillería y por el consolidado grupo de lanzadores abridores, por encima de cualquiera otra consideración.
Pero eso no significa que los Azulejos estén derrotados … porque hay que recordar que esa novena es la cuarta en ganar una serie al mejor de siete juegos a pesar de perder los dos primeros en casa, como ocurrió este año ante los Marineros, uniéndose a los Yanquis de Nueva York, en 1996; a los Mets de Nueva York, en 1986; a los Reales de Kansas City, en 1985, todos estos, cuando disputaron la Serie Mundial.
Verbien magazín El tiempo corre hacia atrás y solo lo atan los buenos recuerdos y las buenas acciones. Gilberto Castillo
