Verbien magazin El tiempo corre hacia atrás y solo lo atan los buenos recuerdos y las buenas acciones. Gilberto Castillo
Si tenemos en cuenta las diversas noticias de los distintos medios de comunicación y sus respectivos escándalos que al parecer se quedan en eso y no se investiga cómo se debiera, el país no ha tenido suerte con los últimos fiscales generales de la nación.
Son lamentables los recientes aquelarres en los que unos fiscales a los que se le denominan narcos fiscales y la Vice fiscal General de la Nación la señora Martha Mancera han protagonizado al parecer vergonzosos actos de corrupción en los que todos, según los medios, se arropan con la misma cobija.
En un país serio donde la institucionalidad es fuerte como por ejemplo Noruega o Finlandia estos hechos o presunciones ya se habrían investigado hasta las últimas consecuencias.
Ni a Colombia ni a los colombianos nos conviene tener funcionarios a los que les salpiquen acusaciones de presuntos delitos, y menos que estos trabajen para una entidad tan importante como es la Fiscalía General de la Nación que forma parte de la rama judicial.
Martha Mancera, ViceFiscal. (Imagen: Fuscalia – VBM).
Recordemos que las funciones de la Fiscalía son las de investigar los delitos y acusar a los presuntos infractores ante los juzgados y tribunales competentes.
Estamos asqueados de tantos escándalos de corrupción, de amiguismo y de procesos que se dejan prescribir a propósito, de casos de paramilitarismo, narcotráfico, enriquecimiento ilícito entre otros más, en los que altos funcionarios de la Fiscalía General de la Nación son los protagonistas, o por lo menos así lo señalan los medios de comunicación.
Un ejemplo de estos casos que al parecer se quedó engavetado es el del conglomerado de Luis Carlos Sarmiento Angulo que, según noticias emitidas por Univisión y La República, entre otros más, en los meses de agosto, septiembre y octubre del año 2023 llegaron a un acuerdo con la Securities and Exchange Commission (SEC), agencia que regula e investiga a las compañías que cotizan en la bolsa de valores ese país, y Corficolombiana deberá pagar 80 millones de dólares.
Eso significa que para la ley de los Estados Unidos este grupo si incurrió en un delito y para la justicia colombiana no, siendo que sobre el tema de Corficolombiana existe mucha tela que cortar: hasta muertes se produjeron.
Esperemos que la Corte Suprema de Justicia escoja en derecho una de las candidatas de la terna enviada por el Presidente de la República, y no vayan a existir presiones de ninguna naturaleza para enredar el nombramiento de la próxima Fiscal General de la Nación.
Ya fue curioso que no se diera este nombramiento y se postergara para el 25 de enero del año en curso.Es curioso también que la Corte no haya investigado los abusos que al parecer cometió el fiscal Barbosa en su administración.
La sola duda sobre la honorabilidad de la vicefiscal Mancera ya le hace daño a la rama judicial y al país. No podemos seguir vendiendo una imagen internacional de corruptos, mafiosos, paramilitares, o de bandidos, pues esto nos debilita y nos convierte en un Estado fallido.
Si bien es cierto que algunos pueden sentir miedo de que un fiscal que no sea de la rosca, llegue a investigar, los colombianos debemos aplaudir que ojalá sea así, porque tenemos que fortalecer no solo la institucionalidad democrática, sino el Estado de Derecho para devolverle la confianza en la justicia.
Tenemos que recuperar la ética y la importancia que significa servirle al país, ya que el ser funcionario público es una dignidad que se debe honrar y no una oportunidad para delinquir en impunidad.
Los que sean creyentes deben orar para que la Corte Suprema cumpla con su deber de elegir a la próxima fiscal y que ojalá sea la mejor opción para que volteemos la página de la impunidad y le devolvamos a la rama judicial la importancia que se merece.
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Clara Inés Chaves Romero: Exdiplomática y escritora. Comunicadora con amplia experiencia en columnas de opinión, en análisis de la política nacional e internacional. Escritora del libro Justicia Transicional, del laberinto a la esperanza catalogado de consulta y del libro Crónicas de Juegos y maquinaciones políticas. Columnista de la revista “Realidades y Perspectivas” universidad de Chile Columnista. “revista Ola Política”, febrero 2019- actualmente.
