La primera ha alcanzado un número récord de usuarios en julio mientras que la segunda los ha perdido en un 70%, según The Wall Street Journal
Zuckerberg vs Musk. (Imagen: archivo internacional – VBM).
Ninguna red social ha dado tanto que hablar en el último año como Twitter, ahora X, ni ninguna otra personalidad del mundo tecnológico ha sido tan controvertida en este tiempo como la de su propietario, Elon Musk. El magnate sudafricano compró la red social el pasado octubre por 44.000 millones de dólares tras intentar echarse atrás de la oferta que había realizado seis meses antes. No lo consiguió e inició un proceso de reformas que comenzó con el despido de cerca del 75% de la plantilla y cambios en las políticas de moderación que dejaron de invisibilizar y expulsar a las cuentas que disentían de las narrativas oficiales en los temas más candentes.
Como consecuencia, Twitter perdió cerca del 50% de sus ingresos publicitarios por la retirada de anunciantes y Musk puso el enfoque en buscar nuevas formas de generarlos y convertir la red social en una empresa rentable. De ahí la transformación en X, que deberá ser una superapp capaz de ofrecer una gran variedad de servicios al estilo del WeChat chino pero en un contexto de libre mercado y sin la parte de operar en un régimen totalitario, lo que complica aún más algo de por sí difícil de conseguir.
Tras la entrada de Musk, un lugar común era vaticinar que Twitter estaba a punto de colapsar tras los despidos por la falta de ingenieros y otros técnicos. Otro, que la nueva política de moderación había convertido a la plataforma en un lugar con barra libre para odiadores, negacionistas, conspiranoicos, machistas y, cómo no, la extrema derecha que harían huir en masa a la base de usuarios tradicional de Twitter en busca de ambientes más “seguros”.
Sin embargo y transcurridos 9 meses, nada de eso ha sucedido. El crecimiento que han tenido alternativas como Mastodon o Bluesky, que aún se halla en beta y con disponibilidad limitada, es testimonial. Otro caso es el de Threads, la nueva red social que ha lanzado recientemente Meta, creada a imagen y semejanza de Twitter y con el nada disimulado objetivo de hacerse con sus usuarios.
Musk, por su parte, ha anunciado que este mes de julio la ahora llamada X alcanzó el número de usuarios mensuales más alto desde su lanzamiento en 2006, 531 millones. La referencia más próxima para comparar son los 237 millones de “usuarios activos diarios monetizables” que la compañía reveló durante el proceso de adquisición. La métrica no es la misma y no es posible precisar con exactitud el crecimiento, pero no parece que los usuarios estén abandonando la plataforma en masa, precisamente.
El único rival potencial que actualmente tiene Twitter, o X, es Threads. Mark Zuckerberg, CEO de Meta, quien mantiene una muy pública rivalidad con Musk, ha visto su oportunidad en las aguas turbulentas por las que ahora navega Twitter creando un clon de la red de microblogging. Threads es extraordinariamente parecida al Twitter de hace unos años y, aunque aún carece de muchas funciones elementales como realizar búsquedas o una versión web de la aplicación, lo cierto es que arrancó el 5 de julio con un extraordinario éxito. 100 millones de usuarios en 5 días. El récord anterior lo tenía ChatGPTcon 100 millones de usuarios en 1 mes.
Las cifras, espectaculares, pueden atribuirse en buena medida a la integración de Threads con Instagram. Los 2.000 millones de usuarios de esta red social de Meta pueden ingresar en Threads con el usuario y contraseña que ya emplean, importar las cuentas que siguen y las que tengan bloqueadas y son activamente empujados a usar Threads desde Instagram. Esta ventaja de inicio generó el récord mencionado, al que le sigue otra cifra que probablemente también lo sea.
En poco más de tres semanas tras el lanzamiento, ha visto caer su uso en más de la mitad según ha revelado Zuckerberg. “Obviamente, si tienes más de 100 millones de personas inscritas, lo ideal sería que todos ellos o incluso la mitad se quedaran. No estamos allí todavía”, dijo el CEO de Meta en una reunión interna de la que se hace eco The New York Post.
Los datos, de acuerdo con The Wall Street Journal, son aún peores. Una caída del 70% de sus usuarios activos diarios, desde el pico alcanzado el 7 de julio, que ha reducido el número a unos 13 millones de personas.
La falta de funcionalidades se presenta como la principal razón, pero hay otras. En cuanto a contenido, no puede compararse con una red social con 17 años a sus espaldas y una base de usuarios más activa y mucho más grande. Por otro lado, Threads necesita imperiosamente captar nuevos usuarios y no solo los de Instagram. ¿Qué sentido tiene saltar a una nueva red para seguir a las mismas cuentas que ya conocías y que van a publicar contenido similar?
El mayor obstáculo para Musk es conseguir que X de beneficios y para Zuckerberg que Threads sea capaz de ofrecer un factor diferencial sobre lo ya conocido que atraiga tanto a usuarios de Instagram como de Twitter u otras plataformas. Pero teniendo en cuenta que Threads aún anda incorporando características tan básicas como un feed cronológico de publicaciones y X está dando pasos acelerados para convertirse en la soñada superapp de Musk, el último testando un wallet dentro de la app, parece claro quién va en la cabeza. (elmundoalinstante.com).