Por: Hugo Artunduaga Salas.
Estamos a pocas horas, para que determinemos el futuro de nuestro devenir, como país democrático. Votar es el instrumento constitucional que tenemos para elegir, lo importante es hacerlo y hacerlo bien, acertar,obrando con la razón y no con sectarismo y mucho menos “en contra de”, debe y tiene que ser,”en favor de”.
Los colombianos nunca hemos estado tan polarizados por las extremas, fruto de odios, sin esgrimir razones, ni propuestas que aporten soluciones a las falencias de nuestro maltrecho país.
Tenemos que aceptar que el experimento de la reelección no fue bueno, ni para los partidos y mucho menos para los que lo ejercieron, pero ese es tema, para otra oportunidad.
Lo cierto y real, es que este domingo elegiremos presidente, lo ideal, que fuera en primera vuelta y si no se logra, ojalá que por lo menos, los dos candidatos que obtengan la más altas votaciones, sean los mejores, para llegar a la segunda vuelta el 17 de junio y así salir de este marasmo e incertidumbre en que nos encontramos.
Los amables lectores conocen mi forma de pensar y actuar políticamente, nací conservador, soy conservador y moriré conservador ( de Caro y Ospina, Alvaro Gómez), pero antes que mi partido, está la patria y consecuente con lo expuesto, mi voto es por: Iván Duque y Marta Lucía Ramírez, apostándole a la juventud, con el soporte de la experiencia.
Dios quiera, que nuestro amanecer del lunes 28, sea esperanzador de una primavera, con paz y progreso.
Para repensar:
La democracia necesita una virtud: la confianza. Sin su construcción, no puede haber una auténtica democracia.
Victoria Camps.
La paciencia es la más heroica de las virtudes, precisamente porque carece de toda apariencia de heroísmo.
Giacomo Leopardi
Las honestas palabras nos dan un claro indicio de la honestidad del que las pronuncia o las escribe.
Miguel de Cervantes
La ley ha sido dada para que se implore la gracia; la gracia ha sido dada para que se observe la ley.
San Agustín