Con un nuevo hecho judicial y político amaneció Colombia este viernes al conocerse la noticia sobre la solicitud de preclusión de parte de la Fiscalía en el proceso que se adelanta contra el expresidente Álvaro Uribe Vélez, quien es investigado por soborno y fraude procesal.
En efecto, el fiscal delegado ante la Corte Suprema de Justicia, Gabriel Jaimes Durán, presentó una solicitud de preclusión para cerrar el proceso y se radicó en el Centro de Servicios Judiciales de Paloquemao, y ahora se asignará a un juez de conocimiento que citará a las partes a una audiencia.
La Fiscalía General de la Nación consideró «luego de la valoración integral de los elementos materiales probatorios, la evidencia física y la información legalmente obtenida durante el curso del proceso» que varias de las conductas por las cuales se vinculó jurídicamente al expresidente no tienen la característica de delito, y otras que sí lo son, no se le pueden atribuir como autor o participe.
La petición fue radicada horas antes de que venciera el plazo que tenía
el fiscal Jaimes Durán para definir
si presentaba escrito de acusación o pedía la preclusión.
Así mismo La Fiscalía pidió seguir la
audiencia de preclusión en la fecha que disponga la Judicatura «y conocer con detalle los argumentos de la
decisión, para formar un criterio propio sobre un caso que debe resolverse
en sede judicial, alejado de opiniones, disputas personales e intereses
políticos».