Por: Antonio Andraus Burgos
Dodgers de Los Ángeles contra Nacionales de Washington; y Gigantes de San Francisco frente a los Cachorros de Chicago, los cuatro finalistas que se disputan la corona del Viejo Circuito.
Los propietarios de las 30 novenas de las Grandes Ligas deben erigirle un pedestal al excomisionado del béisbol de la Gran Carpa, Bud Selig, cuya visión industrial y empresarial está dando los frutos de la reorganización que le dio al sistema de juego del Rey de los Deportes.
Crear el juego de ‘’vida o muerte’’ entre el segundo y tercer mejor equipo clasificado de cada liga para discutir el pasaje para la ronda de la postemporada, fue más que un acierto. Esos partidos extras, ofrecen beneficios a la temporada de cada año, tanto deportivos como económicos, desde cuando fue implantada como norma.
Los dos encuentros extras de este año, tanto el de la Liga Americana, entre los Orioles de Baltimore y los Azulejos de Toronto, como el de la Liga Nacional, entre los Mets de Nueva York y los Gigantes de San Francisco, resultaron simplemente espectaculares. Los dos compromisos fueron de tanta calidad que la victoria tanto en uno como el otro caso, se definieron con batazos de circuito completo y sobre la agonía de los mismos.
El decisivo encuentro entre los Gigantes y los Mets, en el Citi Field de Nueva York, que se jugó el pasado miércoles, por ejemplo, refrescó en la memoria de los aficionados lo que se denomina un verdadero clásico de la ‘’pelota caliente’’.
Lo que hizo desde la lomita de los sustos Madison Bumgarner, el zurdo maravilla de los Gigantes, en los nueve episodios que trabajó, y el tablazo de vuelta completa de Conor Gillaspie, con dos compañeros en la ruta para romper la igualdad en el tablero, quien jugó en la antesala ante una inesperada lesión del dominicano Eduardo Núñez, le entregaron a la afición del béisbol y a la entristecida de los metropolitanos, todo el sabor de lo que es el Rey de los Deportes.
Los Gigantes, jugando la pelota que siempre juegan y que nunca se entregan, ganaron el partido 3-0, frente a la estrella del relevo dominicano de los Mets, Jeurys Familia, quien fue llamado por Terry Collins para subir a la lomita en la apertura del noveno cuando el choque estaba sin anotaciones, después de una estupenda faena de siete episodios del veloz y abridor derecho Noah Syndergaard, y fue entonces cuando se decidió la cuarta casilla para la postemporada en la Liga Nacional.
Y aquí estamos ya en la fase final del Viejo Circuito, a pocas horas de la iniciación de los dos primeros encuentros de la serie divisional.
Dodgers vs. Nacionales
Los Dodgers de Los Ángeles y los Nacionales, en Washington, disputan este viernes a partir de las 5:30 de la tarde, el primer juego de la Serie Divisional de la Liga Nacional, esperándose un lleno a reventar en el parque de pelota ‘’Robert Kennedy’’, de la capital de los Estado Unidos.
Los Nacionales sobre el escritorio, tienen una ligera ventaja frente a los campeones de la división Oeste del circuito. Los monarcas del Este lograron un registro de 256 en promedio de bateo, contra 249 de los Dodgers; despacharon 203 ‘’bambinazos’’ contra 189 de Los Ángeles; impulsaron 735 carreras frente a 680 de los Dodgers; y anotaron 763 contra 725 de sus rivales de turno.
Los muchachos orientados por Dusty Baker, también superan a los pupilos del estratega afro-japonés Dave Roberts, en triunfos de la campaña con 95 a 91; en efectividad de sus lanzadores con 3.51 contra 3.70 carreras limpias por juego. Pero los Dodgers suman más ponches propinados por sus serpentineros con 1.510 contra 1.476, y en cuadrangulares conectados, con 165 contra 155.
Ahora bien. Los pupilos de Roberts entienden la gran responsabilidad que asumen desde hoy, y jugadores como Chase Utley, Corey Sager, Adrián González, Yasiel Puig, Justin Turner, Yasmani Grandal o el panameño Carlos Ruiz, saben que parten de cero y sólo cuenta los resultados que se consigan de aquí en adelante.
Los orientados por Dusty Baker, por su lado, están conscientes de que se juegan el todo por el todo, en busca de la corona del circuito desde este primer juego frente a los Dodgers. Y sobresalen, entre otros, Ben Revere, Bryce Harper, Anthony Rendón, Daniel Murphy, Jayson Werth, Ryan Zimmerman, para buscar el boleto a ganador.
El astro zurdo de los Dodgers, Clayton Kershaw, con tablero de 12-4 y 1.69 de efectividad, el hombre que no ha tenido suerte alguna en las postemporada de las Grandes Ligas, tiene la responsabilidad de trabajar en el primer desafío desde la loma de los sustos. Y por los Nacionales, el formidable lanzador derecho Max Scherzer, con marca de 20-7 y 2.96 de carreras limpias, será el responsable de los lanzamientos en este primer gran clásico divisional.
Dave Roberts adelantó que para el segundo juego llevará al montículo a Rich Hill, con 12-5 y 2.12 de efectividad, que se jugará en Washington este sábado. Para el tercero, que se efectuará el lunes, pero en Los Ángeles, utilizará al japonés Kenta Maeda, con marca de 16-11 y 3.48 de carreras limpias por juego. Dusty Baker, hasta el momento de escribir esta nota, no había escogido a sus próximos dos serpentineros.
El segundo partido de esta serie se cumplirá el sábado 8 de octubre, a partir de las 4:00 de la tarde, hora del Este de los Estados Unidos
Gigantes vs. Cachorros
Los Cachorros de Chicago sobre el papel, lucen imbatibles. Empero, en una serie tan corta, cualquier cosa que suceda, es parte del juego.
Los Gigantes de San Francisco, la última novena en arribar con su pasaporte a la postemporada, ha probado una y otra vez, que cuando llega a estas instancias de la campaña, las derrotas las venden caras… si es que las venden…
Es una lástima, ciertamente, que en esta serie divisional la confrontación sea entre los Gigantes y los Cachorros, cuando una final por el título de la Liga Nacional entre estas dos sensacionales novenas, hubiese sido sencillamente espectacular. Bueno, digamos ahora que es la final anticipada del Viejo Circuito, que no le quepa duda a nadie.
Bruce Bochy, el conductor de los Gigantes, le da rienda suelta a sus antojos en la ‘’pelota caliente’’ cuando de finales se trata. Y casi siempre, deja jugar y maneja los hilos de la conducción de los juegos, como si se tratase de un partido más, y punto.
Joe Maddon, el piloto de los Cachorros, la novena que no gana una Serie Mundial desde 1908, tiene en su nómina al grupo de peloteros que espera derrotar todas las maldiciones, habidas y por haber, empezando por aquella de la ‘’Maldición de la Cabra’’.
Ya en ocasión anterior habíamos señalado que los Cachorros son los favoritos para conquistar el título de la Nacional, pero ¿podrán ganarlo? Si juega como lo hicieron en la campaña regular, las apuestas le favorecen.
Los Gigantes superan a los Cachorros en dos de las estadísticas de la campaña de mayor relieve. En promedio de bateo con 258 contra 256, y en inatrapables conectados con 1.437 frente a 1.409. Pero la divisa de Chicago tiene 199 cuadrangulares conectados contra 130 de San Francisco; 763 carreras remolcadas frente a 675; 808 rayitas anotadas frente a 715 de los Gigantes; y una efectividad de sus lanzadores de 3.51 contra 3.70 de los ganadores de la tarjeta del ‘’Comodín’’.
Kris Bryant, Anthony Rizzo, Addison Russell, Ben Zobrist, Jason Heyward, Dexter Fowler, David Ross, Miguel Montero y Wilson Contreras, es un puñado de jugadores que han exhibido talento y calidad sobre el campo de juego, defendiendo el uniforme de los Cachorros.
Sobre los Gigantes, todo lo que se diga es poco. Bochy tiene en Buster Posey, Hunter Pence, Ángel Pagan, Brandon Belt, Brandon Crawford, Denard Span, Conor Gillaspie y Joe Panik, una plantilla para disputar con altura y mano a mano, todo lo que se le presente en esta serie divisional.
El veterano derecho dominicano Johnny Cueto, con registro de 18-5 y 2.79 de carreras limpias por juego, ha sido seleccionado para abrir el juego de este viernes 7 de octubre en Chicago, a partir de las 9:00 de la noche, hora del Este de los Estados Unidos.
Por los Cachorros lo hará el veterano zurdo Jon Lester, con tarjeta de 19-5 y 2.44 de efectividad, por lo que la estrategia de utilizar a un serpentinero de brazo equivocado en busca del primer triunfo en casa frente a los Gigantes, es parte de lo que aconseja el béisbol cuando en el club rival hay bateadores zurdos que pueden hacer daño.
Para el segundo partido, Bruce Bochy, hasta el momento de esta nota, no había dado a conocer a su lanzador, como tampoco para el tercer desafío. Joe Maddon, en cambio, indicó que para el segundo juego utilizará los servicios de Kyle Hendricks, con tarjeta de 16-8 y 2.13 de efectividad, jugándose también en el Wrigley Field a partir de las 8:00 de la noche del sábado; y para el tercero, que se hará en el estadio de San Francisco, el próximo lunes, llevará a la loma a Jake Arrieta, con registro de 18-8 y 3.10 de carreras limpias por juego.
Estas series divisionales de la Liga Nacional al igual que la de la Liga Americana, depara grandes expectativas y seguramente, partidos de calidad dentro del mejor béisbol del mundo, y nos obliga a cederle a nuestros amables lectores, la oportunidad de que escojan a sus favoritos, porque nosotros no vamos a vaticinar por el momento.