Los Rayas de Tampa y los Atléticos de Oakland, por la Liga Americana; y los Cerveceros de Milwaukee y los Nacionales de Washington, por la Liga Nacional, a disputarse la última casilla de los cuatro grandes de cada circuito.
Por Antonio Andraus Burgos
En el juego de ‘’vida o muerte’’ por la tarjeta del Comodín, tanto de la Liga Nacional como de la Liga Americana, han llegado los cuatro equipos que más batallaron para conquistar ese derecho, para lo que será el último mano a mano de la temporada del presente año en el béisbol de las Grandes Ligas.
Decir lo contrario, es ir contra las evidencias, contra los resultados de los últimos partidos de la recta final, frente a esas cosas inexplicables, pero que son situaciones naturales del juego, como aceptar de manera indiscutible, que nadie tenía entre sus cuentas que los Cachorros podrían perder 8 de sus últimos 10 desafíos, cuatro de ellos, en el Wrigley Field, de Chicago, frente a sus eternos rivales y contrincantes de primera línea, los Cardenales de San Luis; mientras que los Nacionales de Washington, que aparentemente estaban de capa caída, conquistaran 9 victorias en sus últimas 10 presentaciones, 8 de las cuales fueron triunfos de manera consecutiva.
Ni qué decir de los Cerveceros, que tambalearon cuando nadie lo esperaba, pero que soportaron todos los embates habidos y por haber, para conseguir 7 triunfos en sus últimas 10 presentaciones, para salir adelante en conseguir la opción para llegar a la disputa de la tarjeta de invitación, pese a perder a uno de sus pilares de la alineación, como el formidable Christian Yelich, un toletero de quilates y quien seguramente le hará mucha falta en lo que resta de este 2019.
La línea perdedora de los Cachorros le costó el puesto al afamado capataz, Joe Maddon, quien el año que viene no regresa al puesto en Chicago, después de haber sido el estratega que rompió el ayuno de 108 años, para llevar a la novena a una conquista del título de Serie Mundial en el 2016. Pero así es el béisbol.
Y en la Americana
Otro tanto se puede decir de lo que ocurrió en la Liga Americana, en donde los Indios de Cleveland, cuando nadie lo consideraba posible, cayeron en 6 de sus últimas 10 actuaciones; mientras que los Rayas conseguían 7 victorias en sus últimos 10 juegos, y los Atléticos conseguían 6 ganados en las últimas 10 confrontaciones.
Los Rayas, la novena con la plantilla de menor valor, pues no llega siquiera a los 65 millones de dólares en el año, vuelve a ser un ‘’hueso duro’’ de roer, y cuidado que se mete a la postemporada, frente a unos Atléticos que vienen en pos de ganarse el Comodín, a como de lugar.
Kevin Cash, el estratega de los Rayas, está más que contento por la actuación de sus pupilos en la campaña que acaba de concluir, pero espera ir por más, porque con el menor descuido de los Atléticos, en el partido de ‘’vida o muerte’’ de este miércoles venidero, esperan imponer su ley, así sea en plan de visitante, pues al ritmo que tuvo en la temporada, su divisa jugó mano a mano contra todos sus rivales. El club vuelve a esta instancia, después de 6 años de ausencia.
Los Atléticos hicieron respetar su casa, al ganar en 52 oportunidades frente a la irrisoria marca de 29 reveses; en cambio, los Rayas sumaron 48 victorias en plan de visitantes, ante 33 derrotas, guarismos iguales a sus actuaciones en el estadio cerrado de Tampa, pues jugaron para 48 y 33. Hace un año, los Atléticos fueron eliminados por los Yanquis de Nueva York en el partido por el Comodín. Quizás a los Rayas no les será fácil derrotarlos en su casa.
En Washington
Dado que los Nacionales consiguieron un mayor número de triunfos en la temporada, con 93 victorias ante 69 derrotas, tienen el derecho de jugar en su casa, el juego por el Comodín frente a los Cerveceros, que marcaron 89 triunfos frente a 72 reveses.
Eso le da a Dave Martínez, el estratega boricua de los Nacionales, a contar con el apoyo incondicional de la numerosa afición de la capital de los Estados Unidos, que tiene muchas esperanzas en que la novena se clasifique para la final del circuito, después de un comienzo incierto de campaña, al acumular 19 victorias frente a 31 derrotas.
Los Nacionales de capturar la tarjeta de invitación, será la primera vez en llegar a la disputa de una posición dentro de los 4 grandes de la Liga Nacional, desde cuando la divisa llegó a Washington ocupando la franquicia de los Expos de Montreal, en el año 2005.
Con el afamado derecho, Max Scherzer, desde la lomita de los sustos, quien tuvo marca en la campaña de 11 ganados y 7 perdidos, con 2.43 carreras limpias por juego y 243 abanicados, los Nacionales esperan, como ha ocurrido en todo lo que va de este año, que Anthony Rendón, con 34 cuadrangulares y 126 fletadas; el dominicano Juan Soto, con 34 ‘’bambinazos’’ y 110 remolcadas; el segunda base, Brian Dozier, con 20 tablazos de circuito completo y 50 empujadas; y Matt Adams, el primera base, con 20 jonrones y 56 impulsadas, le otorguen la tarjeta de invitación en el crucial juego de este martes por la noche en su casa.
Mientras que los pupilos de Craig Counsell, los Cerveceros de Milwaukee, con el también derecho, Brandon Woodruff, con 11 triunfos y 3 derrotas, 3.62 carreras limpias por juego, confían en que sus hombres pilares de la novena, ante la forzada ausencia de Christian Yelich, tienen que sacar la cara en el crucial desafío, como lo son, el segunda base, Mike Moustakas, con 35 jonrones y 87 carreras impulsadas; el receptor cubano, Yasmani Grandal, con 28 cuadrangulares y 77 remolcadas; el primera base, Eric Thames, con 25 tablazos y 61 impulsadas; y el guardabosques, Ryan Braun, con 22 ‘’bambinazos’’ y 75 impulsadas.
Con un promedio ofensivo colectivo de 265, los Nacionales despacharon 231 cuadrangulares y produjeron 824 carreras; mientras que los Cerveceros marcaron ofensiva colectiva de 247, con 248 jonrones y 741 carreras.
Difícil tarea escoger al ganador de este partido de ‘’vida o muerte’’, de este martes en Washington, empezando el juego a las 8 de la noche, hora del Este de los Estados Unidos. Pero si para algo sirven los numeritos, que en muchas ocasiones no pueden ser termómetro en un solo desafío, nos inclinaríamos por los Nacionales, por estar en casa, por las calidades y cualidades de su abridor, y por la forma cómo han jugado en sus últimos compromisos.
En Oakland
Bob Melvin, el estratega de los Atléticos de Oakland, sostuvo, desde antes de empezar la temporada regular que acaba de concluir, que su nómina ‘’está para grandes cosas, y confiamos en que, con el transcurso del calendario, la novena responda a esas posibilidades’’.
Y de nuevo, los Atléticos están de boca en boca, porque pese a que los Astros de Houston ‘’cabalgaron’’ en la división Oeste de la Liga Americana, la novena luchó denodadamente para discutir, por lo menos, la tarjeta del Comodín.
Los Rayas es una divisa batalladora, que no se entrega, que sabe sortear los momentos de apremio que se le presentan, y que sus peloteros no se dan por vencidos hasta cuando no se cuelga el último out de la última entrada.
En bateo por equipos, los Atléticos están por debajo de los Rayas, con promedio de 249 contra 254 de los visitantes, pues el choque de este miércoles por la noche, a partir de las 8 hora del Este de los Estados Unidos, se hará en Oakland, al concluir con más victorias que la representación de Tampa, en donde el equipo de casa suma 257 cuadrangulares frente a los 217 de los visitantes, produciendo 800 carreras contra 730 de Tampa.
La diferencia a favor de los Atléticos, puede correr a cargo del tercera base, Matt Chapman, quien tuvo marca de 36 jonrones y 91 carreras impulsadas; del primera base, Matt Olson, igualmente con 36 tablazos y también 91 empujadas; del torpedero, Marcus Semien, con 33 ‘’bambinazos’’ y 92 remolcadas, y del guardabosques dominicano, Ramón Laureano, con 24 jonrones y 67 remolcadas.
Por la artillería de los Rayas, la responsabilidad estará a cargo del guardabosques, Austin Meadows, quien despachó 33 cuadrangulares e impulsó 89 carreras; el guardabosques venezolano Avisail García, con 20 tablazos de circuito completo y 72 empujadas; y el torpedero, Willy Adames, con 20 jonrones y 52 impulsadas.
Kevin Cash, el capataz de los Rayas, le entregará la pelota al veterano Charlie Morton, con tarjeta de 16 ganados y 6 perdidos, con 3.05 carreras limpias por juego y 240 abanicados, para que se encargue de la loma de los sustos frente a los Atléticos.
Bob Melvin, por su lado, no se sabe, hasta el momento de escribir estas líneas, si llevará al montículo a su brazo derecho dominicano, Frankie Montás, con 9-2 y 2.63 de efectividad; o al zurdo, Sean Manaea, con 4-0 y 1.21 carreras limpias por juego, en busca de conquistar en su casa, la tarjeta del Comodín. Pero bueno, Melvin tiene toda su rotación disponible, a la hora de la verdad y de las necesidades del juego.
Si la ventaja es por jugar en casa, que eso también suma en el béisbol, los Atléticos son los favoritos; pero los Rayas no son fáciles de derrotar en ninguna instancia.
Los platos están servidos para el último mano a mano por la disputa de los Comodines de la Liga Nacional y la Liga Americana, de donde saldrá el cuarto clasificado por cada circuito, para la postemporada del presente año.
Todo lo demás, ¡ya es historia!