Estamos en época de tensión, ocasionadas por fenómenos tanto naturales como de otras órdenes, entre ellos los…políticos.
Al “Coloso” del Norte le ha tocado sobrellevar varios de índoles diversos: huracanes, tornados y también políticos. Al Presidente Obama no le están saliendo las cosas bien a pesar del esfuerzo en que se ha empeñado tanto en lo humano, lo material, como en su reelección presidencial. Los augurios en el último tema no son los mejores. La está viendo “Negra” el gobernante de color.
Pero si en Estados Unidos llueve y truena en nuestra amada Colombia no escampa. Lo que padecimos en la pasada ola invernal no nos ha servido de lección, por culpa de la incapacidad de los gobernantes seccionales y locales que no han tomado los correctivos que nos permita recibir en forma apropiada la nueva jornada invernal que se augura.
El Gobierno Nacional hace ingentes esfuerzos para poner en marcha un plan maestro para proporcionar viviendas decorosas y seguras, vías secundarias y terciarias transitables, jarillones para impedir del desborde de los ríos y una malla vial acorde con las especificaciones que los cánones de ingeniería establecen, para el siglo XXI, seguimos retrasados y subdesarrollados.
Todo quiere coincidir, pues en octubre tendremos la jornada electoral eligiendo la base primaria nuestra democracia, con nuevos gobernadores, alcaldes y una renovada representación en Asambleas, Concejos y Juntas Administradoras, además con una amplia participación femenina, originada no por el querer de ellas, si no por darle cumplimiento a la Reforma Política; reforma que para mi criterio, le falto más de un “hervor”, porque se precipitaron los legisladores más por lo mediático que por lo sustancial. Dejaron de lado reglamentar circunscripción regional para el Senado, pues ya es hora de acabar con la feria persa de los aspirantes a tan alta dignidad, sacando votos y voticos en los más apartados nichos municipales, que en muchos casos, no conocen ni tienen deseo de conocer. Estos se logran con sufragios, a través del negocio del mercado electoral. ¡Qué Vergüenza!
Una verdadera lección tendremos el 30 de octubre próximo, pues el devenir del mapa político nos va dejar pasmados, tanto a los llamados conocedores, como a los ciudadanos del común. Los lamentos y pesares serán incalculables. ¡Ya veremos!
******
Pasando a otro tema, hasta cuando continuaremos asombrados, que todos los días se destapen más chanchullos, peculados, robos descarados y demás fraudes al erario público. Será que no llegaremos a tocar fondo pronto, para arrancar una nueva y limpia era pública. Se corrompió la sal. ¡Dios nos libre! Y se apiade del pueblo sufrido!
Posdata:
¡OJO! Prohibido morirse. Si, a si como lo está leyendo apreciado lector. Hoy no puede usted dejar de existir, sin antes proveer a sus deudos de un capital no inferior a diez millones de pesos, para sufragar los gastos de exequias. Quien le pondrá coto a tan descarado despropósito de hacer pingues negocios con los muertos. Y eso que todo es prestado: Cajón, sala de velación, ceremonia religiosa, carrosa, flores y cirios. No contamos con lotes ni con cripta.
Muy doloroso y triste a lo acontecido como final de un hombre valioso, estructurado y caudillo, como es Alberto Santofimio Botero. Desde cualquier ángulo que se mire o desde cualquier trinchera política, no podemos si no lamentar la polémica decisión de la Corte. Estaremos viviendo un juicio ajustado en derecho, o abran otras circunstancias extras que llevaron a máximo tribunal de justicia a tomar tan radical definición?
Con el relevo del Ministro de Defensa, sería conveniente que se analizara el futuro de los secuestrados que han logrado la libertad. El triste final del soldado Domínguez nos deja una profunda reflexión, que se está haciendo para el reintegro a la Sociedad de los secuestrados que han logrado la libertad?
Y de los que continúan en el cautiverio que? Nos olvidamos de ellos.