A nivel mundial, se han tejido muchos mitos y creencias alrededor del impacto de las redes en temas de salud y seguridad, aquí, algunos de los más comunes y las razones científicas que los desmienten:
El 5G causa el COVID-19
Este mito surgió durante la pandemia y sugirió que esta tecnología contribuyó a la propagación del virus. Sin embargo, no hay evidencia científica que respalde la idea de que el 5G cause o contribuya al COVID-19. Los virus, incluido el SARS-CoV-2 que causa el COVID-19, se transmiten principalmente de persona a persona a través de gotas respiratorias y no por la tecnología de red.
Las antenas 5G causan problemas de salud como el cáncer
(Imagen: archivo particular – VBM).
El mito sobre las posibles afectaciones a la salud ha acompañado el nacimiento y despliegue de todas las tecnologías. Contrario a las creencias, diversos estudios científicos no han encontrado evidencia convincente de que las ondas de radio utilizadas en las redes móviles, incluida la 5G, causen problemas de salud como el cáncer. Los límites de exposición establecidos por las regulaciones son diseñados para garantizar la seguridad de la sociedad.
El 5G representa un mayor riesgo para la seguridad y la privacidad
Si bien la implementación del 5G plantea nuevos desafíos de seguridad, también trae consigo tecnologías avanzadas, como la encriptación mejorada. Con las medidas adecuadas de ciberseguridad y privacidad, es posible mitigar estos riesgos y proteger la información.
Las antenas 5G causan daños ambientales y a la vida silvestre
Existen preocupaciones sobre el impacto ambiental de las antenas 5G, incluyendo la creencia de que podrían afectar a la vida silvestre y al medio ambiente. La implementación de torres 5G está sujeta a regulaciones ambientales y se realiza de manera responsable. La mayoría de las investigaciones no respaldan afirmaciones sobre daños significativos al medio ambiente o la vida silvestre debido a esta infraestructura.
¿Qué es la tecnología 5G?
5G se refiere a la quinta generación de tecnologías que permite conectarse a Internet desde dispositivos móviles. Se trata de una evolución que comenzó hace ya varios años con la primera generación, que en su momento solo permitía hablar a través de celulares. Esta nueva tecnología es la próxima generación de redes móviles, un salto de evolución en la conectividad que se considera especialmente valiosa por su potencial para:
-Aumentar velocidades y disminuir tiempos de respuesta de comandos a dispositivos a larga distancia.
-Permitir volúmenes masivos de conexiones.
-Obtener mayores niveles de confiabilidad.