Eventos y Marcas – Junio

Una idea para cambiar la historia.

Fonseca, portavoz de Una idea para cambiar la historia. (Fotos: VBM).

En un acto de prensa al que asistieron representantes de la organización fue presentado el proyecto para este año con la presencia de tres exitosos emprendedores, dos colombianos y un ecuatoriano: Leonardo Melo, Luis Felipe Quintero Gómez y Diego Aguinsaca.

Fue de igual manera presentado, como la imagen oficial de la idea, Fonseca,  cantautor bogotano, quien en su exposición manifestó su complacencia de hacer parte  del proyecto y de tener el honor de ser portavoz de un loable propósito latinoamericano. Así mismo soltó frases como: “Se habla mucho de emprendimiento pero poco se hace”, o “una idea es como una bola de hilo, hay que desenrrollarla  e irla tejiendo” y “hace falta una política para apoyar el emprendimiento”.

Este año HISTORY tendrá en el jurado al médico argentino Daniel López Rosseti, especialista en Clínica Médica y Cardiología;  Alejandra Mustakis,  diseñadora industrial  y una de las grandes impulsoras del emprendimiento en Chile, presidenta de ASECH  y directora de iF; Eduardo Posada Flórez, científico  colombiano y Presidente de ACAC; Tessy María López, fisicoquímica mexicana y especialista en Nanotecnología y Nanomedicina. En esta oportunidad se incorpora a este jurado internacional al ganador del 2016 Diego Aguinsaca.

Leonardo Melo, Diego Aguinsaca y Luis Felipe Quintero Gómez

Una idea para cambiar la historia se ha consolidado como una iniciativa exclusiva de HISTORY que busca hacer visible a los ojos del público, a aquellas personas y proyectos de pensamiento innovador y significativo que construirán un legado para beneficio de futuras generaciones. La iniciativa contará con un premio de 140 mil dólares en total y será distribuido de la siguiente manera: 60 mil dólares para el primer lugar; 40 mil para el segundo; 20 mil para el tercero y 10 mil para el cuarto y quinto lugar. Este dinero será destinado en su totalidad al desarrollo y mejoramiento de los proyectos.

CoolSculpting, novedoso procedimiento antigrasa

Ya está en Colombia el novedoso método para bajar o eliminar de manera definitiva  las zonas del cuerpo más propensas al acumulamiento de grasa. Tiene que ver con  el procedimiento denominado CoolSculpting, basado en el congelamiento de células. En este orden de ideas la grasa abdominal, las chaparreras, las papadas, los rollitos de grasa y los llamados michelines no deseados, desaparecerán en tiempos relativamente cortos.

Dicho procedimiento utiliza Cryolipolysis®, un proceso único y patentado bajo licencia exclusiva de ZELTIQ Aesthetics que elimina las células adiposas aprovechando su vulnerabilidad natural al frío.

CoolSculpting  está clínicamente probado, es seguro y eficaz que no requiere cirugía o tiempo de reposo y que ha sido diseñado para congelar la grasa corporal no deseada y deshacerse de ella para siempre. Cuenta con autorización de la Administración de Medicamentos y Alimentos (Food and Drug Administration, FDA) para el tratamiento de acumulación de adiposidad visible en la zona submentoniana, los muslos, el abdomen y los flancos, así como de la adiposidad en la zona situada bajo el sostén, en la espalda y debajo de los glúteos (también denominada “banana roll”).

Desarrollado por científicos de Harvard, el procedimiento CoolSculpting está considerado como  el único tratamiento no quirúrgico de contorno corporal a base de enfriamiento aprobado por la FDA disponible para aquellas personas que buscan eliminar la grasa no deseada  que no responde a la dieta o al ejercicio.

Entre los principales beneficios del procedimiento se habla por ejemplo de ser  Seguro y eficaz, no invasivo, es  personalizado y sencillo. Se lleva a cabo en un consultorio médico y bajo la supervisión de un doctor autorizado. Durante la consulta inicial, ZELTIQ recomienda que los pacientes colaboren con su doctor para diseñar un plan de tratamiento personalizado que se ajuste a las características específicas de sus cuerpos. El procedimiento puede extenderse de una a dos horas (dependiendo de las zonas del cuerpo tratada s) y, durante este tiempo, los pacientes pueden relajarse, leer o incluso tomar una siesta.  (Foto: archivo particular).