Por: Rufino Acosta Rodríguez
Siempre digo que en el fútbol todo es posible y la incertidumbre hace parte de sus mayores encantos. Sobre ese contexto y a la luz de lo que mostró Colombia ante Costa Rica, creo que podemos estar tranquilos para la lucha que se avecina en la Copa América.
No es que pretendamos asumir el papel de pitonisos para afirmar que el combinado tricolor por lo menos debería ser finalista. Ni más faltaba. Pero si creemos que hay equipo para dar la batalla. Con eso nos basta y sobra, por ahora.
Colombia pudo haber apabullado a Costa Rica, que fue entusiasta, rápido y se acercó algunas veces a los predios de Ospina. Solo fue, sin embargo, 1-0, y ello podría dar la idea de poco alcance ofensivo.
Faltó eficacia, eso es indiscutible, más el montón de ocasiones creadas sirve para comprender que se trató de algo circunstancial. y pienso que ante tanta bonanza en la siembra la buena cosecha tendrá que llegar.
Sabe lo que hace
El técnico José Pekerman ratificó una vez más que sabe lo que hace, conoce al jugador y lo pone a funcionar, no importa si en su club lo han dejado de lado o por lo menos no ha actuado con la asiduidad requerida. ¿No decían que el papel de Zapata era incierto porque venía de la banca en el Milán? ¿Acaso Falcao no cargaba la cruz de una experiencia terrible con el Manchester United? Pódríamos seguir con el cuestionario y encontrar siempre la misma respuesta: el mico sabe en qué palo trepa.
Falcao en la historia
El samario Falcao convirtió el gol de la victoria, a los mil y un intentos, y entró a la leyenda como el gran cañonero tricolor de la historia. Ahora acumula 25 tantos y supera al guajiro Arnoldo Iguarán, quien en todo caso conserva intacto su nicho entre los héroes del fútbol colombiano.
El balance de este juego amistoso debe considerarse satisfactorio. Habrá, como es apenas lógico, cosas para corregir porque nadie habla de perfección, algo que entiende y atiende el profesor Pekerman. No obstante, el camino parece despejado y ahora solo tocar esperar el duelo contra Venezuela, que siempre se las ingenia para crearle problemas a Colombia. Aunque lejos de los vaticinios, nos alienta el pálpito de que esta vez las cosas podrían ser diferentes. Ya veremos.