Verbien magazin El tiempo corre hacia atrás y solo lo atan los buenos recuerdos y las buenas acciones. Gilberto Castillo
La politiquería puede conducirnos al peor de los errores frente al fallo de la Corte Internacional de Justicia de La Haya.
La CIJ, dejó en tela de juicio su prestigio, ante un mundo que la consideraba ecuánime e impoluta para fallar con justicia, no para crear conflictos, en zonas de paz.
Aprovechar aquí situaciones como esta, para hacer política opositora, es un craso error de dirigentes que no se resignan a estar por fuera del poder. Son errores politiqueros.
San Andrés y los Cayos son, han sido y serán de Colombia, a pesar del sospechoso fallo que dejó enclavados en mar territorial nicaragüense a Serrana y Quitasueño.
La determinación de La Haya, se la ha querido endilgar el ex presidente Uribe, al gobierno Santos. Ahí aflora la politiquería del ex, que obliga al actual mandatario a pedir el levantamiento de la reserva de las actas de la Comisión Asesora de Relaciones Exteriores. A esto lo ha conducido lo que él denomina “el sida del alma, que es el odio”, en el que incurre su antecesor. Sus insultos no tienen límite, lo calificó de “canalla”. ¡Pobre Colombia, pobre juventud con el ejemplo que ofrece un líder desenfrenado!
Grave error dejar en manos de quién sabe quién esos secretos. Esto es un caso de seguridad nacional que puede ser aprovechado por la misma CIJ para justificar su embarrada.
Vale la pena recordarle al ex presidente Uribe, lo que dije en columna anterior: el doctor Alfonso López Michelsen, el hombre más erudito en materia de la Relaciones Internacionales que ha tenido Colombia, poco antes de morir, pidió una reunión con Uribe, para explicarle la trascendencia de lo que se venía y el plazo perentorio que teníamos para salir airosos. Ante la ausencia de Uribe, el ex mandatario tuvo que explicar tema tan delicado y los errores cometidos al canciller Araujo. Le advirtió: “todavía hay tiempo. Sálganse del Pacto de Bogotá, que el meridiano 82 no es límite…”. Parece que el ex canciller tampoco entendió la cosa y se fue, tal como llegó. ¡Era el último plazo que teníamos! Y en pleno gobierno Uribe.
¿Para qué levantar reservas, si se conocen los culpables? Dejemos la politiquería y el patrioterismo de dientes para afuera.
BLANCO: Colombia será líder del control de armas en la ONU.
NEGRO: El gol que quisieron hacernos con el Tayrona.
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